martes, 18 de mayo de 2010

#

Tú y yo caminando por la calle desierta.
Todas las luces amarillentas parpadeando en las ventanas, la gente dentro de sus casas en un universo aparte, en un aire aparte, acondicionados y entretenidos con historias encerradas en cajas de metal con pantallas.
Cuando me hablas sé que querrías estar diciéndome otra cosa, cuando te respondo sabes que estoy pensando otra cosa distinta. Cuando coges mi mano con la tuya sé que desearías ponerla en otra parte, cuando pongo un pie detrás del otro sabes que querría estar en otro sitio diferente.
Y tú sabes que yo sé, y yo sé que tú sabes que yo sé, y sé que tú sabes. Los dos sabemos.
Tú y yo caminando por la noche desierta en primavera.
Tan inocentes como un tumor.
Tan inofensivos como las ptiriasis.

3 comentarios:

  1. He tenido que buscar pitiriasis, con lo fácil que es decir "hongos"... ¬¬

    Me encanta tu mentira (que está dicha de verdad).

    ResponderEliminar
  2. Yo no he tenido que buscar pitirasis porque ya lo ha buscado el chico de arriba, sino habría tenido que recurrir a la maravillosa amiga llamada "wikipedia". Buena tía de verdad.

    No sabía que ahora te daba por la prosa poética a lo J.R. Jiménez!! la verdad es que no se te dá nada mal... y el tema... quién no ha sentido eso alguna vez?? quién no ha oído algo que no era lo que te querían decir y ha respondido algo que no era lo que quería decir?? a veces nos cuesta demasiado ser sinceros y nos acomodamos en ser falsos...

    Parece que no se te dá nada mal esto del blog, a ver si sigue así de guay!!

    Un besico kotokico!!

    ResponderEliminar
  3. Sí, a veces cuesta demasiado decir lo que es evidente. Preferimos hacerlo todo bien rebuscadito...!

    ResponderEliminar

Sonríeme.