domingo, 5 de diciembre de 2010

No paro de repetirlo, me encantan los perros. Me encanta que sean tan bobos, que te sigan a todas partes, que no se enteren muchas veces de nada, que ladren, que vengan y te den el gusto de comer de tu mano, que te pringuen toda la cara de un lametazo porque te quieren.

Pero siempre preferiré a los gatos. Que son ariscos, que te arañan, que bufan, que tienen el pelo suave y bonito pero no te dejan tocarlo mucho rato, que si te buscan es probablemente porque tienen hambre o se sienten solos, que se escapan durante días, pero al final sabes que no pueden vivir sin ti, ni tú te imaginas viviendo sin ellos.

Prefiero a las personas gato también. Problemáticamente.

1 comentario:

  1. oh, pues yo me pondré el pelo todo lo bonito que tú quieras y te dejaré tocarlo mucho rato y te pringaré la cara de babas de amor y no me enteraré muchas veces de nada :D Así seré un poco perro y un poco gato, y como también soy persona no me preferirás "problematicamente" :D

    ResponderEliminar

Sonríeme.